Amymosy se dio la vuelta y él la siguió, dándole un puñetazo en el culo para terminar el trabajo. Ninguno de los dos quería irse a la cama, cada uno quería que el otro se corriera en su piel. Una vez que se instalaron en el suelo de la ducha, Kelsi se levantó y le dijo que le lamiera el coño. Él obedeció inmediatamente, con sus dulces jugos inundando su boca. Amymosy se quitó los calzoncillos y se agachó para abrirle las piernas y así poder tocar su lindo coño. Justo cuando estaba a punto de correrse, Amymosy se recostó en el suelo de la ducha y le dijo que terminara en su culo. Los dos se echaron a reír y a follar, y su coño fluyó por toda la ducha. Sus grandes tetas atravesaron su blusa apretada, deslizándose a lo largo de su estómago. Podía sentirlas, duras como una roca. Su semen fluía por su pecho, goteando de su semen. Cuando terminó en su trasero, Kelsi se levantó y se acostó en el piso de la ducha con su cabello cubierto con una toalla roja oscura. Amymosy tiró de la toalla y los jugos de su coño se deslizaron por su cuerpo. Amymosy se quitó el resto de su ropa y reveló su coño mojado. Kelsi sacó su polla, bombeándose mientras la miraba. Era algo diferente a ver a su novia enojarse así. Se inclinó hacia atrás y la miró de nuevo. "Así que... ...um... ...sí... . .