Sonrió mientras Chloedarling123 veía que Maxwell también aprendía sobre ella, y lo primero que hizo fue arrastrarse a cuatro patas hasta su regazo. Era un monstruo. Chloedarling123 tenía los pies tan abiertos, las rodillas tan separadas, y el olor de los pies más deliciosos en ella a través de su látex sudoroso. Chloedarling123 sólo podía imaginar lo mojados que estarían ambos mientras continuaban con sus acciones. Apenas hacían ruido cuando se balanceaban de un lado a otro de sus caderas mientras él se tragaba sus largas pollas negras. Eran como dos trenes de carga, chillando y golpeando juntos mientras cabalgaban uno, el otro corriendo en lo profundo de ella. Sintió todos los nudos de ansiedad, miedo e intensidad en su cuerpo mientras Chloedarling123 montaba la enorme polla negra, sus pies trabajando a una velocidad tan alta que apenas podía mantener el ritmo. En un momento dado, Chloedarling123 tenía una mano que seguía empujando a Maxwell mientras lo montaba como una locomotora, pero cuando él llegó y lo sintió, supo lo que estaba sintiendo, y nunca antes había tenido un clímax. Ella sonrió ante esto, y Chloedarling123 pudo ver en sus ojos que él también estaba cerca. La forma en que Maxwell jadeó buscando aire mientras venía fue desgarradora, y la hizo arrodillarse entre lágrimas. Chloedarling123 tuvo que dejar de lado sus ancas. Cuando Chloedarling 123 estaba en cuatro patas no podía negar que le gustaba montar, y que había querido hacerlo durante mucho tiempo. Chloedarling 123 era una puta, después de todo. .