Sabía qué hacer y como había predicho, le costó mucho detenerse para hacer más, mientras Magrose añadía a la lluvia de espuma. Una vez que el líquido salió de su culo, me metí entre las piernas y me abrí como ella lo había hecho, luego me posicioné para el gran final. Suavemente puse mi cara entre sus muslos y lentamente lamí y chupé su abertura y una vez que encontré su agujero empujé suavemente, y empecé a cogerlo, primero con un dedo y luego con la punta de mi consolador. Magrose empezó a gemir y fue como si un interruptor hubiera sido accionado, podía decir por el placer en su cara que así fue. Magrose sintió que la cantidad de placer que le habían dado iba a dar sus frutos. Magrose se corría con fuerza cuando sus jugos comenzaron a salpicar por todas partes, pero yo estaba a punto de usar eso a mi favor ya que la seguía recogiendo y usando en un callejón. Magrose podía oír sus gruñidos con placer. Podía oírla gotear y mientras su cuerpo masajeaba mi polla pude ver que Magrose estaba disfrutando aún más y quería más. Tenía una gran sonrisa en mi cara cuando empecé a sentir que ella hacía la mayor parte del trabajo, un dedo frotando mi trasero mientras Magrose conducía el eje hacia el interior y la vi arrojar otro chorro. .